Esta escapada en Arcos de la Frontera es imprescindible para conocer una de las localidades más espectaculares del sur de España y poder descubrir tanto su gastronomía como su historia y cultura. Arcos de la Frontera es famosa por su Peña de Arcos, un gran balcón natural con increíbles vistas al río Guadalete y al sur de la ciudad. Entre la ciudad de Jerez, conocida por sus vinos y la de Ronda, Arcos de la Frontera es el lugar ideal para relajarse y disfrutar de un ambiente más tranquilo. Cerca del Parque Natural de Grazalema, éste es perfecto para hacer un recorrido a pie o simplemente respirar el aroma del abeto pinsapo, un árbol que crece solamente en esta zona de Cádiz.
En Arcos de la Frontera no te puedes perder el Castillo de Arcos, construido en una primera fase por los musulmanes en el s. XI, fue modificado por los cristianos entre los siglos XIV y XV. Y aunque en la actualidad no se puede visitar en su interior, representa la mítica estampa de Arcos de la Frontera. Cerca se encuentra la Iglesia de Santa María, de origen mudéjar.
Pero solo el simple hecho de caminar por las estrechas calles de Arcos vale la pena. Descubrir ventanas al balcón de Arcos, y disfrutar de su gastronomía tras una buena caminata. El gazpacho serrano o la Alboronía (un guiso de calabaza y garbanzos especiado) son platos típicos que puedes degustar en la ciudad, sin olvidarnos de los buenos vinos de la tierra que se producen en la zona.
Esperamos que disfrutéis de vuestra escapada en Arcos de la Frontera.