Proponemos comenzar la ruta saliendo una noche por la ciudad de Logroño. Una escapada en Logroño ofrece una buena oportunidad para tapear y disfrutar de enoturismo en Rioja. En la calle Laurel, repleta de bares y tabernas, podemos disfrutar de los vinos de la zona y de las mejores tapas riojanas. Y no se quede quieto, vaya de bar en bar para probar cosas distintas.
En la misma ciudad hay muchas bodegas que se pueden visitar, y a pocos kilómetros de la ciudad le sorprenderá la belleza arquitectónica de algunas de sus bodegas..
Otra visita interesante son las cavas subterráneas (calados) del s. XVI. en las que antes de hacía vino y que ahora son restaurantes, exposiciones de arte, etc.
Logroño es parte del Camino de Santiago y parada importante para los peregrinos. «El Camino se hace tapa a tapa» reza uno letrero que se encuentran los peregrinos al entrar en la capital Riojana. Si bien la cita más importante del Camino por tierras riojanas se encuentra en Santo Domingo de la Calzada, Logroño ofrece ambiente de Camino, lo que siempre se agradece.
La ciudad bañada por el Ebro ofrece una abundaten vida cultural más allá de bodegas y tapeo. Os recomendamos nuestro artículo con las mejores cosas qué ver en Logroño, en el que podréis encontrar un buen número de ideas para disfrutar de una escapada en Logroño y la Rioja.